El color de estos huevos rosas se consigue gracias a un ingrediente muy especial: la remolacha. El jugo de remolacha es un colorante natural super potente con una capacidad ingreíble de teñir todo lo que pilla por su paso, literal. Así que, ten cuidado con las tablas de madera o cualquier superficie que se tiña facilmente.
El poder colorante de la remolacha, le da un color rosa intenso y brillante a la clara de huevo, mientras que la yema mantiene su color amarillo. No obstante, es posible modular la intensidad del color, hasta incluso llegar a penetrar en la yema del huevo. Esto se consigue controlando el tiempo en que los huevos están en el escabeche. Cuanto más tiempo se mantengan encurtidos, más intenso será el sabor y el color rosa resultante de los huevos.
Si te apetece probar otras recetas con remolacha, te dejo por aquí este delicioso Hummus de remolacha y lentejas para dippear con unos crudités de verduras o untar en tus sándwiches favoritos.